Aprendedor inquieto o emprendedor del conocimiento
Hoy te voy a plantear la primera cuestión de las muchas que espero ir poniendo sobre la mesa a partir de ahora y vamos a tratar de descubrir si eres lo que yo llamo un aprendedor inquieto, o lo que muchos llaman “nowmad”, neologismo anglosajón muy de moda inventado por un tal John Moravec, que combina las palabras “now” (conocer o saber) y “nomad” (nómada), por lo que viene a significar algo así como “nómada del conocimiento”.
Este término sirve para identificar a un cierto tipo de personas capaces de establecer su espacio de trabajo casi en cualquier momento y lugar, sin ningún tipo de límites o restricciones físicos o geográficos.
Se dedican a intercambiar información e ideas provenientes de sus conocimientos y, por las características de su perfil profesional, están relacionadas estrechamente con la tecnología y el mundo online.
¿Eres emprendedor?
Me he sentido tentado, y me hubiera resultado más fácil, utilizar la expresión «emprendedor» tan recurrente en estos tiempos, pero es que realmente no tengo muy claro lo que es. Además, normalmente, la palabra emprendedor se suele asociar a aspectos profesionales y aquí vamos más allá.
No sé si por emprendedor se entiende que es el clásico autónomo de siempre, el empresario de toda la vida, un profesional liberal, o el también moderno y anglosajón “freelance”.
Aunque en realidad todos siguen siendo autónomos y, un emprendedor, en sentido estricto, es «alguien que acomete y comienza una obra, un negocio o un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro«, así que probablemente sea una mezcla de todos ellos, ¿quién sabe?
En cualquier caso, según la definición oficial, creo que podría considerarse como emprendedores a muchas más personas de las que pensamos. Por ejemplo; a pesar de haber trabajado por cuenta ajena muchos años, y por mucho que les escueza a algunos que se pasan la vida filosofando, teorizando y dando lecciones sobre el tema, somos muchos los que podemos considerarnos emprendedores porque llevamos toda la vida acometiendo un proyecto tras otro.
Dicho esto, me identifico mucho más con el término que encabeza este post, aprendedor inquieto, no solo en el ámbito laboral o profesional sino en todos los ámbitos de la vida.
Primero, una aclaración
Deja que te explique por qué prefiero utilizar el término aprendedor inquieto antes que «nowmad«. Es muy simple: sin menospreciar a nadie, me gusta más expresarme en mi idioma, que es muy rico y variado. Ya.
Sí, ya sé que a muchos les parecerá que estoy desfasado. Probablemente a esos que utilizan el inglés para todo, aunque le estén hablando a su tía la del pueblo. Que quieres que te diga.
Ni utilizar algunas palabras de otro idioma, aunque suene forzado, te hace más inteligente, ni utilizar tu propio idioma en tu país te hace menos. Que cada cual haga lo que le parezca. No obstante, me parece curioso, gracioso y a la vez patético, la actitud de quienes no saben utilizar correctamente su propio idioma, pero se pasan el día usando anglicismos.
Qué es un aprendedor inquieto
De la palabra inquieto, aunque tiene alguna acepción más, me quedo con lo obvio, “que no está quieto», y con su segunda acepción según el diccionario de la RAE: “Propenso a promover o efectuar cambios”.
Es decir, estamos hablando de una persona que siente la necesidad de hacer cosas para lograr sus metas y alcanzar sus sueños, que no se acomoda en su burbuja esperando a que las cosas «pasen» y que es valiente a la hora de tomar decisiones y aplicarlas por lo que, sobre todo, es una persona que se mantiene siempre activa. Unas veces PRO, aceptando retos, y otras RE, reparando errores, nadie es perfecto, pero nunca es pasiva. Asume riesgos y responsabilidades y toma el control de su vida.
En cuanto al término aprendedor creo que no hace falta explicar demasiado: “Que aprende.” En este caso me refiero a esa clase de personas que toman nota de sus experiencias, acertadas y erróneas, para aprender de ellas y mejorar. Pero no para colgarse medallas e inflar su ego con sus experiencias positivas o utilizar las negativas como excusas para instalarse en la queja continua y el victimismo.
También son personas que saben que no saben nada, como el viejo Sócrates, por lo que nunca dejan de hacer honor a esta palabra con vehemente entusiasmo y, en ese afán de aprender, tarde o temprano, aprenden lo suficiente como para poder enseñar alguna cosa, o muchas, a otros aprendedores, como ellos, dispuestos a escuchar.
«Cuando el oído es capaz de comprender, entonces aparecen los labios que han de llenarlo con sabiduría». (El Kybalion)
Creo que esto resume el carácter de este sitio web y a quienes va dirigido. Si eres un aprendedor inquieto y estas decidido a ser tú el cambio que quieres en tu vida, este sitio es para ti.
Y, como siempre; que cada cual haga de su capa un sayo y con su vida lo que le parezca, sin molestar a nadie. Ya sabes que yo nunca he dicho que tenga razón en nada; por eso no doy consejos a nadie y no digo lo que se debe hacer o no. Solo escribo para que quien quiera entender entienda.

Autor
Soy Alberto Corbas, coach no directivo y entusiasta del acondicionamiento físico. Me encantaría que setuelcambio te sirviera de algún modo y acompañarte a alcanzar tus objetivos personales y/o de fitness.
¿Listo para hacer un cambio?
Suscríbete
Podrás mantenerte al día de nuevas publicaciones y actualizaciones. Aprovecha setuelcambio para tu crecimiento personal.

Comentarios
Si quieres comentar o preguntar algo, con relación al post, aquí puedes hacerlo. Recuerda aceptar la política de privacidad y las condiciones de uso de la sección y, por favor, sé constructivo. Gracias por tu aportación.
0 comentarios